Carlos Manuel Jiménez Cruz: un hombre lleno de creatividad
Terminó sus estudios en el 2001.
“Me considero una persona emprendedora y con mucha pasión por el arte del diseño”.
Este hombre de 33 años de edad nacido en Costa Rica ha logrado crear bellezas dentro de hogares, empresas y claro en eventos importantes. Todo inició en el centro de estudio Savannah College of Art and Design, ubicada en los Estados Unidos pero esta no es la única sede también existe en Georgia, en Atlanta, Hong Kong, y Lacoste, Francia.
Ha temprana edad ingresó Jimenez para descubrir cuanto se puede soñar, no es una universidad en la que sea fácil entrar, pero esto no detuvo a este diseñador que desde muy joven compartía sus decisiones con su madre. En estos momentos se encuentra trabajando en su propio negocio conocido como “Cloud9”.
“Cloud9 design, es un estudio de diseño especializado en diseño interno comercial y residencial, decoración, branding, signage y eventos; mi socio y yo nos encargamos de brindar un servicio de calidad que nos provoque tener constantes retos a la hora de cumplir con nuestro clientes”, comentó la diseñadora y socia Melissa Ouellette.
Carlos ha trabajado para el 8vo Rooftop, Alta Hotel, Hotel Papagayo Resort, Mangrove Hotel, Ostra Restaurante entre otros, lo cual le ha permitido posicionarse como uno de los decoradores de interiores más buscados por empresas y servicios, desde turismo hasta restaurantes.
Conozcamos un poco más de su trabajo…
¿Cuál ha sido el proyecto más interesante que ha realizado?
Para mí todos mis proyectos son interesantes, siempre hay algo diferente que hacer y eso me aviva me hace explorar nuevas ideas y me obliga a proponerme retos. Y eso me hace feliz ya que me siento capaz de hacer cualquier locura con pura seguridad.
¿Cómo funciona este trabajo o cómo lo ejerce usted?
Este trabajo es divertido y dinámico, si hay que saber bastante de diseño, a veces vienen clientes he intentan darnos una explicación de lo que buscan pero es más sencillo, al menos para mí cuando voy al sitio y tomo nota para proponer una idea.
¿Ha trabajado con marcas reconocidas?
Sí, Smirnoff Daylight fue un evento lleno de color uno de los trabajos más agotadores pero al mismo tiempo brillantes que se ha visto en eventos en Costa Rica. Simplemente una belleza con sus complementos de arte, música y diseño no hay palabras para describirlo.
¿Se especializa en algún estilo en específico para sus diseños?
No precisamente, disfruto de jugar con todo tipo de diseños, ese es el secreto arriesgarse a descubrir nuevos estilos que brinden o que tengan como finalidad lo que se busca.
¿Quién es su mayor inspiración?
Podría enumerarte y decirte nombre a nombre y la lista no acabaría, soy admirador de quienes saben dar un trabajo diferente, creativo, que se reinventen constantemente, a esos son los que admiro y claro también aprendo.
¿Cuál es su meta?
Mi meta es seguir trabajando en lo que me gusta y disfrutarlo cada día al levantarme, tal vez llegue a crecer más la empresa y si es así bienvenido sea. Soy feliz con lo que tengo y me siento lleno porque hago lo que me gusta y no muchas personas pueden hacerlo; yo tengo esa oportunidad y la valoro.
